Canciones del net0e

jueves, 18 de marzo de 2010

"Forbes", nuevo territorio del narco

¿Usted ha sabido los niveles de escolaridad de El Chapo Guzmán? ¿Le han platicado alguna vez sobre los posgrados obtenidos durante su vida académica? ¿Le han invitado a usted a la presentación de algún libro, muestra pictórica, conferencia o inauguración de obras de beneficio social a cargo de la Fundación Guzmán Loera? Vamos, ¿de perdida a la siembra de cualquier otra cosa que no sea mariguana?


Lo que atormenta mi corazón

Figúrese usted si no. Usted y los demás mortales nos matamos y nos despellejamos el alma trabajando como burros. Con una serie de esfuerzos brutales, extraordinarios y eventualmente inhumanos –como si usted fuera candidato del PT en San Pedro Garza García– logra uno un patrimonio más o menos. Uno suda la gota gorda para renovar el carromato que conduce y adquirir un vehículo. ¿Y todo para qué? Ni más ni menos que, para brincar la crisis de la bolsa neoyorkina de valores, lo mejor posible.

Evidentemente, esos esfuerzos ingentes son percibidos por los hijos, los amigos de los hijos, y los anexos, conexos y similares.

Al llegar a casa

Al llegar a casita, usted degusta sus sagrados alimentos, conversa con los vástagos de sus entretelas, para más tarde abrir el diario y leer la información siguiente: "Guzmán Loera persiste en la lista de ‘Forbes’".

Ya son dos años consecutivos. El Chapo Guzmán es nuevamente considerado como uno de los hombres más ricos del continente americano.

Usted se clava en la noticia. El líder del cártel de Sinaloa, considerado por las autoridades federales de México y Estados Unidos como uno de los criminales más buscados, aparece en la misma revista al lado de Carlos Slim, de Bill Gates y de los Jeques árabes, calificado y ubicado entre los hombres multimillonarios en dólares.

No es broma. La nota aparecida en "Excélsior", informa que la fortuna del narcotraficante está calculada ¡en mil millones de dólares!, lo que ubica a Guzmán Loera en el octavo lugar de una lista de nueve mexicanos en "Forbes".
(Espacio para sacar lápiz, papel y una calculadora científica para trabajar con cifras astronómicas)

Hagamos algunas estimaciones.

De inicio, es ridículo que en Estados Unidos ofrezcan por "El Chapo" una recompensa de 5 millones de dólares y en México sólo 30 millones de pesos. Y en seguida le comentaré por qué.

Guzmán Loera tiene 55 años de edad y lo que ha "ahorrado" suma la cantidad de mil millones de dólares, que si Pitágoras no me mintió, debe escribirse así: 1,000’000,000 USC.

Si la cifra es correcta, el Jeque Guzmán percibe $18’181,819, es decir, 18 millones 181 mil 819 dólares por cada año de 365 días. O sea, en los bisiestos es un poco más.

Al dividir la cifra anterior entre 365 días, nos arroja la siguiente cantidad: el Chapo percibe $49,813.21, que quiere decir, 49 mil 813 dólares con 21 centavos, por cada día.

Si cotizamos el dólar a 14 modestos pesos mexicanos, el pobre señor Guzmán Loera, ha ganado $697,385.00, esto es, 697 mil 385 pesos ¡¡¡diarios!!!

Si Joaquín Guzmán Loera fuera agremiado de Elba Esther Gordillo en alguna escuela rural patrocinada por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), el señor ganaría algo así como $29,057.70 (29 mil 57 pesos con 70 centavos) ¡¡¡¡por hora!!!

Por si fuera poco, la revista "Forbes", además de catalogar a "El Chapo" como uno de los hombres más ricos, en noviembre de 2009 lo incluyó también como uno de los más poderosos del mundo, de acuerdo con la misma nota de "Excélsior".

Después de que "Forbes" le ha lanzado toneladas de incienso al líder del cártel sinaloense, evidentemente resulta harto difícil comentar con los hijos, que el mejor camino para tener éxito económico, es el trabajo fecundo y creador. Por supuesto, "la honrosa medianía" a la que Juárez invitaba a los burócratas, como que no encuentra espacios adecuados.

El efecto es previsible. Por ello, me parece que la formación en valores de los hijos resulta fundamental, al momento de transmitir la pedagogía de la honestidad, la licitud de los fines y de los medios; y sobre todo, el sentido ultraterreno de la vida… aunque jamás vayan a aparecer en "Forbes".

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