Las cosas están cambiando dentro de la organización de los Charlotte Bobcats después de ver cómo el legendario Michael Jordan no sólo atendió a un trabajo de calentamiento del equipo, sino que además también compitió en un duelo de creatividad con el base novato Gerald Henderson.
Jordan, que el pasado fin de semana, se convirtió en el nuevo dueño mayoritario de los Bobcats, a la espera que el resto de los propietarios de los equipos de la NBA lo aprueben a final del presente mes, quiere demostrar que su compromiso va a ser "completo".
Aunque Jordan perdió con Henderson los dos enfrentamientos del estilo que se conoce como "H-O-R-S-E" y no quiso hablar con los periodistas, sí lo hizo constantemente con el entrenador, Larry Brown, y con el gerente general del equipo, su amigo, Rod Higgins.
Tampoco se cortó a la hora de intercambiar expresiones "basura" con Henderson, a quien comenzó ganando, pero al final perdió y dio pie para que el base novato dijese que Jordan tendrá que dejar el campo de golf y comenzar a entrenar en un gimnasio si quiere aspirar a ganarle.
Lo que sí tiene claro es que está ya al frente de un grupo inversor que ha comprado las acciones mayoritarias al empresario Bob Johnson, quien después de pérdidas millonarias desde que consiguió la franquicia de los Bobcats en el 2003, decidió venderla.
El legendario jugador de los Chicago Bulls no tendrá problemas de adaptación porque desde el 2006 ya es accionista minoritario y lleva todos los asuntos relacionados con los fichajes y asuntos del baloncesto, pero no ha sido un asiduo a los actos del equipo, mucho menos acudir a los entrenamientos.
Sin embargo, esta temporada, que el equipo tiene marca ganadora y ya ocupa el octavo puesto de la Conferencia Este que le daría opción de disputar la fase final por primera vez en su historia, Jordan quiere ver cumplido ese objetivo como primer paso en su nueva etapa de dueño.
Mientras, Higgins confirmó que el fichaje del veterano escolta Larry Hughes ya no se dará, pero el equipo no descarta el conseguir a otro jugador para darle más ayuda a ese puesto dentro del equipo en su lucha por conseguir disputar la fase final.
Jordan, que apareció en las instalaciones del equipo con ropa informal de vaqueros y zapatillas deportivas, se mostró siempre sonriente mientras competía con Henderson, al que no quiso aceptarle un tercer duelo después de haber perdido los dos primeros.
El base novato le recordó que en cualquier momento iba a comenzar a fallar, a lo que Jordan le contestó que eso también le decían en Cleveland cuando se enfrentaba a los Cavaliers (1989) en su época de jugador de los Bulls.
Al final el base tuvo razón, Jordan comenzó a fallar los tiros y Henderson se llevo el triunfo en el duelo sorpresa que se vivió en Charlotte, donde esta noche los Bobcats se enfrentan a los Dallas Mavericks.
"No hay ningún secreto que todos los que estamos aquí hemos llegado de la mano de Michael, por lo tanto su continuidad es motivo de satisfacción", declaró Higgins. "Estamos convencidos que las cosas van a marchar en la dirección correcta".
Mientras tanto los jugadores también se mostraron "contentos" que Jordan hubiese comprado al equipo y eso se notaba ya dentro de la plantilla con un nuevo "espíritu" y "entusiasmo".
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