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viernes, 12 de marzo de 2010

"Desde mi cielo", "decepcionante", pero…

"Desde mi cielo" ("The Lovely Bones") es la más reciente creación de Peter Jackson. Las críticas han sido dispares con la cinta, pues algunos afirman que aunque su manufactura gritaba Óscar, al final no cumplió con las expectativas y fue ignorada en la contienda que se llevó a cabo este fin de semana.


Mientras que otras no fueron tan duras e incluso resaltaron uno que otro detalle, como la forma en que aborda un parteaguas en la vida de una familia; así como las actuaciones de la pequeña Saoirse Ronan y el maquiavélico Stanley Tucci, quien además es caracterizado de forma espeluznante.

Éste es un filme con una temática cruda, dura. Se encuentra basado en la novela homónima de Alice Seabold, la cual narra el asesinato de una niña de 14 años, Susie Salmon, (Ronan) justo en uno de los días más felices de su vida, lo que provoca una identificación inmediata con la audiencia.

La actuación de esta joven promesa es excelsa, pues pasa de la inocencia, al temor, a la frustración con enorme naturalidad y elocuencia. No por nada a su corta edad ya fue nominada al Óscar por su interpretación en "Expiación, deseo y pecado" ("Atonement").

El vecino de Susie, George Harvy (Tucci), un asesino en serie, la observaba cuidadosamente y aguardó el momento perfecto para aprovecharse de la confianza de la niña y terminar con su existencia. Pero ella, sin comprender lo que le ocurrió, queda atrapada en el limbo, desde donde le envía señales a su padre para que descubra al culpable.

La tragedia impacta de forma distinta en cada uno de los miembros de la familia. Su padre, con quien Susie era más cercana, (Mark Wahlberg) se muestra renuente a dejarla ir y usará todos los medios a su alcance para desenredar el misterio.

Su madre (Rachel Weisz) no tolerará el comportamiento de su esposo y lidiará con la pérdida alejándose de todo y acudiendo a la ayuda de su alcohólica madre (Susan Sarandon); mientras que cada uno de los hermanos pequeños tratará de seguir con su vida.

El filme tiene una ambientación y diseño de arte por demás creativo, especialmente en las escenas acaecidas en el limbo, en donde el surrealismo se apodera de la pantalla por medio de grandes efectos especiales, los cuales son un reflejo de lo que ocurre en el mundo real, en un intento por unir las historias para que no permanecieran como ejes paralelos.

Pero la ambientación del mundo de los vivos, que tiene lugar en la Pennsylvania de principios de los 70 también es la adecuada, aunque no es tan sobresaliente como la antes descrita.

El filme, por momentos lento, por otros lleno de suspenso e intensidad, principalmente en las escenas de Tucci, llega a un punto climático en el que los espectadores nos encontramos al borde del asiento, ansiosos porque se alcance la justicia y los personajes reciban su redención y castigo.

Tal vez la crítica esperaba otro resultado, tal vez Jackson pudo hacer más con el material o profundizar en los vínculos entre los personajes, tal vez el asesinato ocurre muy al principio de la película, pero lo que sí es cierto, es que tras verla uno no puede sino quedar impactado, atemorizado y con enormes ganas de aprovechar cada uno de los segundos que nos quedan, al lado de nuestros seres queridos.

Es un hecho, "Desde mi cielo" habla sobre una pérdida de esas que dejan llagas profundas difíciles de sanar; sorpresivas, que no debieron ocurrir; cuando las víctimas no hicieron nada malo para que ello les ocurriera, pero a fin de cuentas deben de seguir viviendo y lidiando con las consecuencias que la vida les tiene deparado.

¿Te animas a verla? En lo personal no me arrepiento ni remotamente, de haberlo hecho.

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